¿El uso de la violencia es un medio legítimo de defensa?
Por: Área de Derecho Penal. Consultorio Jurídico, Universidad de Ibagué.
Un fallo proferido el 13 de abril de 2021, por el magistrado Jaime Andrés Velasco Muñoz de la Sala de Decisión Penal del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Bogotá D.C, fue objeto de controversia. En la sentencia se analizó el caso de una pareja que convivía bajo una unión marital de hecho y que sostuvo una airada discusión, debido a que la mujer intentó tomar el teléfono móvil de su compañero, con el propósito de ver las conversaciones de la aplicación WhatsApp, dado que sospechaba que este sostenía una relación sentimental con otra mujer. La discusión concluyó en un forcejeo, producto del cual la mujer sufrió lesiones en el brazo izquierdo, y se le dictaminó incapacidad médico legal definitiva de cinco días sin secuelas.
En la parte considerativa, el magistrado ponente precisó que, en el caso en mención, el imputado había obrado en legítima protección de un bien jurídico tutelado de la intimidad con rango de derecho fundamental, ante el riesgo inminente de vulneración por parte de su compañera sentimental, quien, de forma abusiva, pretendía tomar el teléfono celular con la finalidad de revisar su correspondencia privada. No obstante lo anterior, consideró, de igual forma, que, si bien el procesado había obrado en legítima defensa, bien pudo haber logrado recuperar su teléfono por otros medios persuasivos, como el diálogo, antes de acudir al uso de la fuerza física, razón por la cual, resolvió condenarlo como autor responsable del punible de violencia intrafamiliar cometido en exceso de legítima defensa, conforme lo dispone el inciso 2.º del numeral 7.º del artículo 32 del Código Penal.
Pese a que en el caso en particular se hizo un juicio de necesidad, proporcionalidad y ponderación entre la defensa del derecho a la intimidad y el uso de la fuerza, resulta preocupante que en el imaginario social permanezca la errónea idea de que cualquier acto de violencia en circunstancias similares puede ser justificado bajo la legítima defensa, máxime cuando los índices de violencia doméstica van cada día en aumento en nuestro país.